En el servicio de
este domingo, que banquete nos dio nuestro misericordioso Dios a través de la predicación.
Nos mostró como le hizo una promesa a
Abraham en Génesis 12:1, donde dice: El Señor le había dicho a Abram: «Deja tu patria y a tus parientes y a la
familia de tu padre, y vete a la tierra que yo te mostraré. Entre otras cosas me di cuenta que Dios hizo
una promesa, pero que si Abraham no salía de su Ur, nunca habría llegado a la tierra
prometida. Y pensé cuantas veces Dios
nos habla y nosotros (lo digo por experiencia propia) nos quedamos diciendo
Dios me hablo, pero, no hago lo que me dijo.
Se me hace difícil obedecer, simplemente porque quiero la bendición a mi
manera, esto es de tal o cual forma. Ha
pasado el tiempo y cuanto de lo que Dios nos habló, no se ha cumplido por el
hecho de no reaccionar. Abraham no lo
hizo a la primera, pero lo hizo. Todavía
hay oportunidad. Solo tenemos que
decidirnos a hacerlo. Pues Dios es fiel
y cumple su Palabra. Es mejor llorar
haciendo la voluntad de Dios, pues, al final el lloro se convertirá en Gozo.
Dios te bendiga y gracias por tu tiempo.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario